¿En qué consiste la reparación de tuberías sin zanja?

Evitar las rotura del terreno y la realización de obras que dificulten la circulación cuando una tubería sufre una fractura o problema que requiere de una reparación es posible a través de las obras sin zanja.

En el post de hoy te explicamos cómo se reparan las tuberías sin abrir zanjas.

Técnicas de reparación de tuberías sin zanja

Los avances tecnológicos actuales han permitido la optimización del tiempo y los recursos posibilitando el arreglo de tuberías sin necesidad de llevar a cabo una obra civil a través de distintas técnicas que destacan por su rentabilidad y éxito:

Entubado

Esta técnica consiste en el arreglo de la tubería a través de la introducción de otra de menor tamaño dentro de la misma, estas tuberías tienden a ser de polietileno, aunque bien es cierto que en algunas ocasiones pueden ser de acero en función de múltiples factores como la situación en la que se encuentra la tubería a reparar.

Fragmentación

También conocida con el nombre de bursting, en esta técnica la nueva tubería se introduce rompiendo la anterior, de modo que la nueva tubería no tiene por qué ser necesariamente más pequeña que la que había previamente, sino que podrá ser igual o incluso de un tamaño un 20% superior.

Manga impregnada con resina

Esta técnica requiere de amplios conocimientos para llevar a cabo ya que es más especializada que las anteriores. Consiste en revestir la tubería estropeada desde el interior, tras la aplicación de la resina se utilizará agua caliente para posibilitar la distribución del producto a lo largo de la tubería, lo que hace que esta técnica pueda utilizarse para tuberías de todo tipo de diámetros.

En Inviasa nuestra experiencia y el continuo aprendizaje acerca de las últimas innovaciones nos permite identificar la técnica más adecuada para la tubería a reparar en función de sus características y las del terreno.